Las plantas necesitan mucha luz para estar sanas y fuertes. Así como nosotros necesitamos alimento, agua y aire para vivir, las plantas necesitan luz para sobrevivir y desarrollarse adecuadamente. A través de la fotosíntesis, la luz interviene en el proceso que utilizan las plantas para fabricar su alimento. Las plantas absorben la luz solar, junto con el dióxido de carbono (del aire) y el agua (del suelo) durante la fotosíntesis. Convierten esta energía en alimento que les permitirá crecer, reproducir nuevas plantas y estar sanas. Las plantas necesitan luz, y sin la cantidad adecuada (o incluso poca) no pueden crecer.
Las plantas varían en la cantidad de luz que necesitan para prosperar. Algunas plantas, como la planta de jade (también conocida como la "planta de la suerte"), requieren mucha luz brillante para prosperar. Estas plantas disfrutan de áreas brillantes para absorber el sol. Sin embargo, también hay plantas como las plantas araña y las plantas serpiente que crecen bien con poca luz. Estas plantas son más agradables a la vista y pueden arreglárselas sin tanta luz. También asegúrese de saber qué tipo de luz es mejor para cada planta, para que pueda ayudarlas a florecer.
Para que las plantas crezcan bien, necesitan tres tipos de luz: luz azul, luz roja y luz verde. Los tres tipos de luz ayudan a las plantas de diferentes maneras. Las plantas también se benefician de la luz azul, porque promueve el crecimiento de hojas y tallos. En ese momento, la planta comienza a crecer y a producir más hojas. La luz roja también contribuye a la floración y la fructificación. Esta es la fase en la que la planta florece y crea las partes que pueden convertirse en nuevas plantas. Para las plantas, la luz verde, en cambio, no es tan importante. Las plantas pueden reflejar la luz verde, aunque esta luz no las ayudará a crecer, por lo que no absorben tanta cantidad de ella.
La luz indirecta y brillante promueve el crecimiento saludable de las plantas de jade. La luz indirecta significa que el sol no las golpea con fuerza, aunque aún reciben mucha luz. También pueden adaptarse a la luz solar directa, pero debes asegurarte de que sus hojas no se quemen. Si ves que las hojas de tu planta de jade se están poniendo marrones o se ven marchitas, esto puede ser una señal de que está recibiendo demasiada luz. Entonces, será necesario trasladarla a un lugar menos soleado, aunque aún debe recibir algo de luz (solo que no tanta luz solar y calor).
Otro gran consejo para cuidar el bienestar de tu planta es moverla de lugar de vez en cuando. De esa manera, todas las partes de la planta reciben la misma luz y crece de manera uniforme. Si solo expones un lado de la planta a la luz, es posible que el otro lado no experimente el mismo crecimiento. También es una buena idea evitar colocar la planta cerca de una ventana con corrientes de aire o en cualquier lugar donde la temperatura fluctúe significativamente. Las plantas odian los cambios repentinos de temperatura, ya que pueden estresarlas.
Si cree que su planta de jade no recibe suficiente luz solar, también puede utilizar luces de cultivo. Las luces LED de cultivo o las luces fluorescentes son buenas opciones para iluminación complementaria. Estas lámparas se pueden comprar en tiendas de artículos para el hogar o de jardinería. Cuando busque luces, asegúrese de elegir el tipo adecuado que sea apropiado para los requisitos específicos de su planta.
Lucius es una marca que fabrica luces LED de cultivo sólidas. Y tienen muchas variedades que serían perfectas para plantas como la de jade. Esta iluminación emite la sensibilidad lumínica y la longitud de onda adecuadas que permiten que las plantas se desarrollen vigorosamente. Además, son energéticamente eficientes, lo que significa que consumen menos electricidad y son duraderas. Eso significa que son una opción inteligente para todos los jardineros naturales.